Me hace mucha gracia y me dan mucha pena los anuncios para curar la impotencia y esos otros dirigidos a mujeres solas que quieren viajar. Por ejemplo, el anuncio de Trivago. Me da mucha pena la gente que son víctimas de sus propios impulsos ante la ausencia de una motivación más elevada. Y me indigna un poco la publicidad dirigida a mal satisfacer esos impulsos vacíos, para generar un mayor vacío interior. El Mercado es moralmente neutro, solo multiplica la produccíon de bienes y males que la sociedad demanda. Son las sociedades las que están moralmente sanas o enfermas. Me dirán : ya está este con sus moralinas. Por qué no se calla. Pero la verdad es siempre incómoda. Tanto como para que te apedreen. Ya lo dijo San Pablo: "De modo que me he hecho enemigo vuestro por deciros la verdad?". En esta época superficial e inane que toca a su fin, San Pablo no sería martirizado, sino, simplemente, ignorado.
Por que hablo de vacío interior? Porque el hombre no puede vivir para si mismo; Ni desde la óptica moral que ha impregnado las tradiciones de todas las culturas (y mucho mas la cristiana) como desde el punto de vista de la más descarnada y neutra lógica evolucionista. Si hemos perdurado hasta ahora, como individuos y como sociedad, es porque ha habido un impulso natural hacia preservar y satisfacer no las necesidades de cada individuo en un sentido hedonista corto de vista, sino las necesidades de todos, muchas veces aún a nuestra costa. El vacío se siente cuando uno no aporta a los demás mas de lo que recibe. El blanco de los ojos, algo único en el ser humano, permite a los demás "leer" nuestras intenciones, aún perjudicándonos a nosotros mismos, sus portadores, porque nos impiden mentir eficazmente. Por eso las personas con gafas oscuras parecen amenazantes, porque no podemos leer sus intenciones en los ojos y por eso es signo de respeto quitarse las gafas de sol para hablar con alguien. el blanco de los ojos es una adaptación social: es perjudicial para cada uno, pero en conjunto la sociedad funciona mejor porque atenúa la posibilidad de mentir. De la misma forma, tenemos adaptaciones psicológicas que valoran si nuestra aportación a la sociedad merece la pena más que el coste que suponemos para los demás. Sean los demás nuestra familia o la nación entera. De ahí que, como dice el cristianismo, la alegría está en dar, no en recibir. Y el vacío interior, la depresión y el suicidio son el otro lado, son la
apoptosis social que nos quita en medio cuando percibimos que no merecemos la pena para los demás. Son adaptaciones sociales, como el blanco de los ojos.
Una sociedad sana se lanza a socorrer a los deprimidos y los intenta llenar de sentido. Pero esta sociedad está demasiado llena de gente vacía, demasiado preocupada por tapar su propio vacío a base de satisfacer impulsos primarios. Mientras luchas por sobrevivir y actúan las facultades mentales inferiores, no tienes que preocuparte por problemas existenciales de vacío interior; Vi en un documental hace unos minutos a un chica: "Si no fuera por el Snowboard, estaría pensando en mis propias miserias". Otros practican deportes o actividades mas extremas por lo mismo. Poner la vida a prueba o simplemente coquetear con el peligro es el escape mas socorrido contra el vacío interior. Pero también hacerse 5 km corriendo todos los días para acabar extenuado. O intoxicarse con drogas. El hiperactivismo moderno es debido a ese vacío interior generado por el individualismo hedonista promocionado a todas horas en los púlpitos televisivos a cada segundo. Porque el individualismo hedonista ni está en nuestra naturaleza ni la satisface. Al contrario, lleva a la desesperación.
En una supuesta reacción contra esto y buscando la satisfacción de esa necesidad fundamental de ser útil a los demás está el solidarismo sentimental exagerado que también se observa. Ese embarque en cualquier causa que nos salga al paso. Esa gente que se deja manipular porque necesita sentirse parte de algo que merezca la pena, pero que se embarca en cualquier cosa sin ningún sentido crítico y es pasto de chamanes, charlatanes televisivos, políticos engañabobos y mangantes de todo tipo que hacen el agosto trincando subvenciones y patrocinando campañas televisivas. Esas exaltaciones patríóticas el dia que juega la selección y después si te he visto no te conozco, y esas lloreras coordinadas por la televisión cada vez que pasa algo no son signo de patriotismo ni de compasión, sino algo más cutre, efímero y primitivo. La emoción por la emoción, sin ninguna base detrás, como en los pueblos salvajes o las hordas, como en la histeria de masas.
Spengler lo describió muy claramente en "La decadencia de Occidente": En las sociedades en su fase terminal, coexiste el mas alto grado de salvajismo con la más alta sofisticación en las mismas personas, porque coexisten los logros civilizatorios acumulados por generaciones anteriores con la decadencia de las personas que han perdido sus fundamentos y regresan a lo mas básico y primitivo.
En el medio, está el ciudadano corriente que sufre su época, que ni es tan adolescente sin cabeza como para tirarse por un barranco ni tan panoli como para dedicar su vida a las ballenas, pero que en el fondo está imbuido de las mismas ideas y de los mismo errores. Una de las patrañas de la época es que todo tipo de problema , sea físico, psicológico o espiritual es un problema físico que se puede tratar química o conductalmente Y es la lógica consecuencia, mire usted por donde, de un problema filosófico mal resuelto en el siglo XIII. Todo se reduce a endorfinas y feromonas, terapias conductales y programaciones neurolingüísticas de ahí al infinito. Se mezcla pseudociencia con ciencia, lo que se sabe con lo que se cree que se sabe y lo que sería bueno que fuera como queremos. El wishful thinking se ha elevado a la categoría de fuente del Derecho y a veces a la categoría de Realidad, sin más. La felicidad no es ya eso, un derecho -cosa aberrante- sino que la felicidad es lo normal y la infelicidad, una enfermedad que debe ser tratada, que es mas aberrante todavía.
Asi que todo el mundo, de clase media para arriba, simula ser feliz. La felicidad es en Occidente lo que el comunismo era en la URSS: no puedes dejar de serlo o la gente no te habla por temor al que dirán... o que harán. De manera que el hombre moderno parcela su vacío interior y lo intenta satisfacer con actividades, terapias y cursillos talleres, causas y "renovaciones" interiores: "No soy feliz porque no estoy bien con mi parienta porque no funciono en la cama. no soy feliz porque Manolo no funciona". Cuando no, obedece simplemente impulsos primarios porque si. "Me voy a Venecia porque me gusta viajar". Para alguien de hace un siglo o dos, eso sería incomprensible. Solo iría a Venecia por algo para reunirse con su amante por ejemplo o aunque fuera solo para que le dieran los aires.
Cito ambos casos el de la impotencia y el de los viajes para ilustrar otros muchos casos en los que hay algo espiritual detrás, cuya satisfacción inmediata no satisface, sino que la empeora. para aquellos que tienen ceguera cartesiana, para los que van de sobraos racionalistas, con "espiritual" me refiero al sentido de la vida. Si la vida tiene sentido o no, respondiendo a la pregunta: ¿Hay mas sentido de la vida por el simple hecho de tomar viagra o viajar a Venecia o no? A eso me refiero.
Evidentemente no. Es mas: puede ser peor. Y eso es lo que importa. Entonces ¿Por qué los hombres sufren impotencia y las mujeres viajan? Podría preguntarse. Si eso no hace mas feliz, por qué ocurre o por qué lo hacen? La respuesta es evidentemente, que la felicidad no es ni un derecho ni mucho menos una condición de normalidad. La felicidad es la consecuencia de una vida ordenada en torno a lo que realmente somos y no lo que queremos o creemos ser (y que nos dejen hacerlo). La felicidad no es consecuencia de la libertad, la libertad es necesaria pero no suficiente, sino consecuencia de conocer lo que somos: quienes somos de donde venimos a donde vamos y obrar en consecuencia ordenando los impulsos dispersos de nuestra vida hacia las metas que nuestra naturaleza espera de nosotros. Es decir, la felicidad se puede alcanzar ordenando las acciones mas bajas hacia la consecución de las mas elevadas, que necesitamos alcanzar más incluso que las mas bajas. Labor que antes lo ejercía la ciencia moral y la Iglesia y ahora la llevan a cabo los sociólogos, estadísticos, los políticos y la televisión. Es evidente que no hemos ganado nada bueno en el cambio.
Dado que el magisterio de las ciencias morales -y mucho menos la Iglesia- no puede ser restablecido en la época del Homo Twitter, hay que tirar de un lenguaje que el moderno entienda, y ese lenguaje es el de la Ciencia más básica. Aunque quizá ya sea demasiado tarde. Cosa que sería terrible, porque el ultimo lenguaje siempre es el de la miseria, la guerra y la enfermedad, que es inapelable y certero, porque _siempre_ alinea hasta al mas idiota con la realidad, aunque es demasiado doloroso y sus enseñanzas apenas alcanzan a una generación y media, como lamentablemente estamos comprobando.
Por qué los hombres sufren impotencia? De acuerdo con la teoría de la selección natural no hay nada mas anti-evolutivo en principio que eso. Un hombre en teoría, cuanto mas copule, mas descendencia puede tener, al contrario que la mujer. Por lo tanto lo lógico es que los hombres no sufrieran impotencia ni en casos de enfermedad, o depresión. en ningún momento porque sería lo de esperar si funcionara la teoría de la selección natural. Pero ese punto de partida no es cierto cuando el macho colabora en la crianza de los hijos como ocurre con la especie humana. Un hombre tiene que estar seguro de que está criando sus propios hijos y no ha sido engañado por su mujer. De otra manera las mujeres podrían hacer criar a los hombres los hijos de otros. Por eso existen los celos masculinos y la impotencia, entre otras cosas. Los celos son un impulso que tiende a vigilar a la pareja en todo momento. El objetivo que la evolución asigna a esta conducta es ese precisamente, evitar incurrir en el doble coste de ser engañados y criar los hijos de otros y perder nuestro esfuerzo en ello en lugar de concebir y criar los nuestros.
Pero cuando el hombre está enfermo, o se siente vulnerable o su mujer es imposible de vigilar, porque está gran parte del día fuera, o no confía en ella en general, o se siente deprimido porque le han despedido y su mujer no le respeta etc, entonces una estrategia alternativa para evitar ser engañado es simplemente no poder copular con ella. Ante esa abstinencia es evidente que ella no puede venirle con que está embarazada de él. Y por eso los hombres suelen tener rachas de mucha actividad sexual y rachas de abstinencia: concentrando el tiro en determinadas fechas es mucho mas difícil que ella le engañe con un embarazo que no es el suyo. Además la impotencia suele ser selectiva. Suele ser con la pareja habitual, pero los hombres saben que las demás le pueden motivar igual que antes.
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Por tanto en la época actual es normal que la actividad sexual dentro de la pareja haya disminuido, dado que la mujer trabaja y el hombre no puede fiarse de ella como ocurría antes. En épocas de crisis como ahora, la situación empeora. De ser el hombre el que demandaba actividad sexual, como ocurría en los matrimonios de antes, ahora son las mujeres las que lo demandan. Es lógico y compatible con la inseguridad que el hombre siente.
Señora, si quiere que su marido la desee, haga que confíe en usted. Hombre, si usted no siente deseo por la mujer que usted quería es que en las actuales circunstancias, usted no confía en su mujer. Por mucho tratamiento que se haga, el tratamiento no cambia eso. A usted se le pondrá dura, pero solo será una pantomima. La mujer estará mas contenta, .Entre otras cosas, porque puede engañarle a usted con mas facilidad. No porque sepa conscientemente eso, pero sus procesos inconscientes lo saben. Si a usted le han despedido o está deprimido y su mujer le ha perdido el respeto, no ganará gran cosa tratándose de su impotencia. Solo le dará mas tiempo y libertad a ella para buscarse a otro. Para su situación con ella, lo importante no es que usted esté activo sexualmente o no. lo que importa realmente es que usted está en paro y si le quiere su mujer o no.
En cuanto a los viajes por parte de las mujeres, esto responde a un impulso evolutivo: las mujeres, como los chimpancés hembra son los que cambian de grupo, porque los hombres son el núcleo de las tribus. La política, la defensa etc son actividades masculinas porque a los hombres les va la vida en ello. En la tribu donde los hombres llegan a la adolescencia es donde viven y mueren y por las que luchan. Eso era así en el pasado y hemos heredado esa psicología. Las mujeres además por lógica genética evitan la consanguineidad, que todos los criadores saben, produce una descendencia débil, y por eso son mas atractivos para ellas los extranjeros. Por eso mismo esa tendencia a mezclarse con extraños por parte de las mujeres es lo que las impulsa ahora que el extranjero está a tiro de billete de Ryanair. Lógicamente el momento mas placentero para las mujeres no es cuando visitan monumentos o playas desiertas, sino cuando se mezclan en el extranjero con la multitud en una zona de compras o de esparcimiento que no difieren en nada del mercadillo o del centro comercial o el discopub que tienen a la puerta de su propia casa.
Pero las mujeres no saben que ese impulso está dirigido a buscar una pareja estable para tener hijos, y dedicar sus esfuerzos a cuidar su pequeño clan, que es lo que satisface plenamente la psicología y da sentido a la vida de la mujer. Y para eso servía en el pasado. Ahora solo sirve para perder el tiempo o para quedarse embarazada y hacer que un novio de aquí crie al hijo de otro, cosa que no tendrá nada fácil, o acabar en un aborto cuyo trauma le perseguirá toda su vida. No conseguirá la satisfacción de las necesidades mas elevadas, en este caso la seguridad, el amor, la maternidad.
Por supuesto, hay muchos mas matices, pero quiero presentar las opciones mas crudas y corrientes. No hay espacio para más
En resumen, la satisfacción desordenada de deseos, o el tratamiento de problemas existenciales como si fueran meramente físicos no hace otra cosa que agravar esos problemas existenciales o espirituales.
No nos quedemos en la mera curiosidad, en lo curiosas que son estas explicaciones. La curiosidad es otro impulso desordenado. Tomemos estos ejemplos como una muestra de que el ejercicio desordenado de la libertad, sin una guía hacia las metas elevadas de la naturaleza humana, osea, hacia llegar a ser uno mismo lo que uno es en lo mas profundo, en lugar de actuar mal informado por modas o por engaños, solo nos puede hacer infelices, cuando no desesperados o incluso suicidas. Pero todo esto son cosas sabidas. Es lo que dice la moral, el cristianismo, la iglesia. Yo solo modestamente las repito en otro lenguaje.
Con tanto libro de autoayuda de todo a 100, yo creo que esto supera en calidad a tanta basura que hay por ahí. Sobretodo en lecturas de verano. Y si he enfadado a alguien contra mi, entonces es seguro que he acertado. Que Dios os bendiga.