viernes, 25 de septiembre de 2009

No se puede aprender de alguien sin autoridad

hay un aspecto que no se considera acerca de la autoridad en las aulas, y es muy simple: La educación también se basa mucho en modelos a imitar, y un jóven y un niño nunca emularán a alquilen que no tenga autoridad o predicamento social. por simples razones de sentido común, o si se quere, biológico-evolutivas. Por eso ahora mismo los niños en lugar de querer ser bomberos, medicos, profesores etc, quieren ser raperos mafiosos, cantantes o actores y desprecian a sus padres y profesores.

Esto tiene toda la lógica. ¿Que modelos va a elegir un niño si no son aquellos que sirven para tener éxito? Un evolucionista darwinista vería en la detección de éxito y en la imitación de las conductas que llevan a ello como una función clave en un ser capaz de aprender como el ser humano. La experiencia diaria es que los niños cuando juegan o fantasean nunca lo hacen bajo la figuta de perdedores precisamente.

La destrucción de la autoridad de padres y profesores y en general toda figura con un cualquier tipo de ascendiente social, no ha cambiado la avidez de los niños y jovenes por imitar a los que exhiben una jerarquia superior a la suya. Antes querían ser bomberos, policias, maestros, o simplemente ser como su padre. Ahora quieren ser chulos de puta., actores, cantantes o al menos chuletas de barrio por exactamente las mismas razones y porque estos son los únicos que no salen ridiculizados en las series de televisión.Antes el padre era un dios. Ahora el padre es un ser despreciable, y el dios es el niñato cantante de turno disfrazado de gangster saliendo de una mansión. Es obsceno, es desolador, pero es la realidad y es absolutamente lógico, dada la destrucción de todo signo de autoridad, aunque sea informal de los roles y actividades tradicionales.

Hace tiempo los niños supongo que se disfrazaban de archiduques o principes porque no existian los simpson ni Woody Allen ridiculizando a esas figuras sociales. Pero si eso fuera lo único, seria positivo. El problema es que eso no se queda aqui, y se ridiculiza, cuando no se ataca a padres, y profesores ("We don´t need more education. Education for control" Pink Floyd) y profesionales de todo tipo. Los únicos que se salvan por alguna razón son los héroes de cartón: Los actores, los cantantes y los delincuentes. La destrucción de jerarquia y de modelos sociales ha sido pavorosa. Solo quedan los modelos-basura. Son los modelos que quedan para los niños.y los niños y jóvenes los consumen con toda la lógica del mundo.

Esto también se comenta al final de este artículo de opinión en LD

Paso a la autoridad

Es paradójico que hace unos cuantos años a nadie se le hubiera ocurrido conceder a los profesores el rango legal de autoridad. Durante la ominosa dictadura, algo así habría resultado absurdo, habida cuenta de que el maestro ya era una autoridad sin que fuera necesaria ninguna ley. El maestro no ocupaba un lugar de autoridad por su nombre y apellidos, sino por su función sobre los alumnos. Los niños, como aspirantes a miembros de pleno derecho de la sociedad, debían estar en manos de aquellos que ya lo eran para aprender lo que la calle no enseñaba para ser "hombres de provecho".

Pero ese tipo de jerarquías informales era figuras de un orden social que la izquierda se ha encargado de destruir. Para la izquierda, el niño es una esponja ávida de aprender. Son los métodos autoritarios de enseñanza y los estereotipos sociales los que le impiden florecer. Simplemente: rodéese al niño de actividades educativas. Lo mismo puede interesarse por perseguir ardillas que por un libro de Shakespeare o, mejor aun, por uno de Gloria Fuertes, que para el progre son lo mismo. Para la pedagogía progresista, la mejora de la enseñanza pasa por poner la sociedad patas arriba, en otras palabras, destruir lo que hay y crear una sociedad nueva donde la inocencia del buen salvaje, o sea el niño o el joven, dictará unas nuevas reglas.

Ésta es una parte más de su visión uniforme de la sociedad como un mátrix impuesto a la gente por medio de la manipulación y el miedo. Es una superestructura ideológica creada por obispos antropófagos y fascistas que se pierden en la noche de los tiempos, y mantenida por empresarios y políticos corruptos y criminales. El objetivo del progresismo es la liberación, esto es, la destrucción de ese orden a cualquier precio. Pese a ser el único movimiento puro que ha dado la humanidad, el progresismo a veces tiene que contemporizar con algún brazo de la hidra social y parasitario por razones tácticas, como hace ahora mismo con la economía. Pero al mismo tiempo, se siente fuerte como para destruir los otros brazos, como han hecho y hacen con la educación y prácticamente todo lo demás.

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3 comentarios:

  1. La verdad es que yo entendía la canción de Pink Floid dirigida hacia algo así como la asignatura educación para la ciudadanía.

    Un saludo

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  2. Este artículo es de lo más claro y lúcido que he leído sobre el tema. Se agradece. Vamos a poner los pies en el suelo, vamos a admitir sin miedo cómo funciona hoy la mente de niños y adolescentes, y a partir de ahí establecer un sistema educativo, y si se pudiera, una imagen de los adultos en los medios de comunicación. Basta ya de pedagogía russoniana trasnochada, basta ya de ñoñerías. El mundo es competitivo, y la educación no puede escapar de ese axioma, hay que preparar al niño para el mundo. Cansada estoy de viejos progres "solidarios" que crean pequeños monstruos situándose en una visión equivocada de la realidad y del niño. El mundo es como es, y la naturaleza humana es como es, pero estos progres buenistas creen que el mundo es como a ellos les gustaría que fuera. De este modo absurdo, en una irrealidad absoluta, consiguen chicos mucho mas violentos, desesperados y competitivos en una escala de valores monstruosa.

    El niño quiere una imagen de padres y profesores fuertes y seguros, unos referentes a los que pueda admirar y respetar, que tengan autoridad al tiempo que capacidad para comprenderles, pero sin ceder a chantajes. Todo el mundo intenta maximizar su beneficio inmediato, y el niño desde que nace. Ninguno en nuestra sociedad podemos abandonarnos a la satisfacción inmediata de nuestros caprichos, y el niño tampoco. Esperemos que se divulguen más artículos como éste y se empiece a implantar un poquito de cordura, antes de que sea tarde.
    Enhorabuena de nuevo por la entrada.

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  3. Ni "educar" ni "inculcar". La coacción es inevitable y "además" la verdadera motivación de la "inculcación" y por ende de la "educación". La lucha se establece entre unos y otros y se justifica de un modo u otro. El resultado está en unos casos u otros, en unas críticas u otras, en una ocultaciones o ignorancias (voluntarias o casi) y otras... ¿De qué parámetros se habla, desde qué sistema (moral) de coordenadas, desde qué "obsolutos" apriorísticos e indemostrables?

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