lunes, 13 de junio de 2011

La expropiación de las conciencias

He escrito Un nuevo fragmento de mi ensayo inacabado  Un programa para recobrar la corudura

Una de las características del mundo actual es la expropiación de la intuición, el sentido común y de la conciencia por la ideologia dominante a través, sobretodo de ley y la enseñanza, mas allá del adoctrinamiento. Los mandatos morales apelan a la conciencia, que es mucho mas sensible a las circunstancias y puede hacer un juicio mas fino que lo que puede hacer el mejor tribunal externo. Las limitaciones del sistema legal y la legislación positiva convierten al aborto en un derecho al limite del plazo legal y un asesinato al día siguiente. La acusación de maltrato condena a un hombre por el mero testimonio de una mujer. Esas aberraciones son consecuencia las limitaciones del sistema legal cuando se mete en ambitos donde ni tiene ni puede tener un conocimento pormenorizado de las infinitas circunstancias que pueden ser agravantes o atenuantes, dicho sea de pasada y sin que eso agote ni mucho menos las consideraciones que se podrían hacer acerca del ejemplo. La prohibición de fumar es otro ejemplo de expropiación de las conceincias y la estatalización de conflictos personales que lleva asimismo a la expropiación de la responsabiliidad personal.. En el fondo hay un programa totalitario, el de la agenda de la élite positivista-relativista.

Esa expropiación de la conciencia es una manifestación grave, pero no la única; En cuanto al aprendizaje, la mente se sirve de ejemplos particulares que luego generaliza por medio de mecanismos inconscientes. Este instinto o grupo de instintos, de que es parte la intuición, que se vale de ejemplos y de “aprender haciendo” tal como enseñban nuestros antepasados, ha sido sustituido por aburridísimos e inutiles métodos racionalistas como la enseñanza de idiomas a través de largas y aburridísimas clases de gramática o la enseñanza de la Música a través del largos y aburridísimas clases de solfeo. Estos atentados contra la mas elemental de las nociones pedagógicas se basa en la teoría de que una vez introducido el esquema racional en la cabeza, el cerebro utilizará ese esquema para hacer musica o hablar Inglés.

Nada más lejos de la realidad. Así es como funcionan ciertas cosas no innatas, pero no el sentido musical, ni el lenguaje. ni la moralidad,ni la educación en general, porque lo. Lo que necesitamos son ejemplos, y buenos ejemplos para adaptar nuestra capcidad innata de extraer conocimento al contexto cultural en el que estemos. Los esquemas racionales deben estudiarse una vez se obtenido un conocimiento intuitivo y no al revés. El objetivo del esquema racional es afinar el conocimiento. Pero nunca puede ser la base de éste, porque la mente no aprende así.

Estas aberraciones educativas racionalistas no solo se reducen a estas facetas básicas de la educación, también se aplica a las ciencias y a las mátemáticas, donde se enseñan fórmulas sin preocuparse de comunicar un sentido intuitivo a las leyes o a los teoremas. El donde, por qué, cuando, para qué etc son fundamentales para aprender cualquier materia, incluidas ciencias y matemáticas, porque así es como el ser humano ha aprendido siempre las cosas. Lo que se aprenden tienen una causa, una utilidad, se le ocurrió históricamente a alguien y siguió unos pasos hasta dar con la solución, unos pasos titubeantes, incluidos sus fallos que son interesantisimos porque son enseñanza en si para conocer como funcionan otras mentes y para mostrar al enseñado que la aventura del conocimiento se hizo por hombres tan falibles como ellos y por tanto ellos podrán también partir en su propio viaje. Esos pasos nunca coinciden con a versión aseptica y deslabazada, con paso seguro pero sin sentido por carecer de contexto, de uin libro de fisica o un libro de matemáticas modernas, sin prosa y sin historia. En resumen ¡ Sin vida!.

Para Feyerabend, el filosofo de la ciencia genial que reverenciaremos cuando esta locura desapareza, era fundamental el mostrar la ciencia a través de su historia, no como un corpus de supuestos conocimientos consolidados finales, desprovistos de contexto. Es fundamental para comprender lo que la ciencia es un proceso imperfecto e inconcluso, como todo lo humano. Esa limpieza de cara con la que nos administran la Ciencia es el escudo protector que tiene el positivismo y su núcle, el cientifismo, contra cualqueir indagación sobre las limitaciones de su propio método, cualquiera que sean sus variantes. Ese lavado de errores y esa ahistoricidad del conocimiento, está en el nucleo que la ideología moderna, el positivismo cientifista, que oculta su falibilidad como cualquier sacerdote oculta las contradicciones y fallos de su libro sagrado.

1 comentario:

  1. Te animo a continuar tu trabajo. Estás en el buen camino.

    Un saludo

    Pablo el herrero

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